Por tradición a las 12 de la noche me toca pedir deseos, este año dejé de ser egoísta y pedí también para los demás, me concentré en un solo deseo, "que nos vaya genial a tod@s", bueno, espero que se cumpla para los demás porque en el recuento de los primeros días del año no ha sido precisamente lo mejor para mí.
Sé que unos días no definen un año pero sí quedan grabados en la mente los dichos y hechos cuando ha calado en el alma un sentimiento, ya pasará como todo en esta vida pasa. Mañana será otro día.
Orgullo vapuleado, mi pecho esta que arde,
que profunda es la herida,
la que me abriste una tarde,
¡sí que me lastimaste! al irte de mi vida.
Como proa que acuchilla separando las aguas,
dos palomas que una tormenta de vida dispersa,
separó la estupidez ¡vaya que causa!
a dos voluntades que lágrimas costó enhebrarlas.
Días confusos de entredichos, idas y venidas,
encuentros, desencuentros ¿es esto la vida?
parece mentira que de tanto vivir y amar,
solo queden fragmentos para mal recordar.
Se irá la angustia, cesará el dolor; yo imagino;
el tiempo dicen, cura el mal de amor; yo dudo;
regusto a ajenjo por el tiempo perdido,
proyectos y promesas ¡a la nada! es mi destino.
Nuevo año
. Marcelo Pesaresi
Publicado por
Sph
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